Judo

Judokas ilustres

La modalidad masculina está dividida en 10 niveles de acuerdo con el peso de los judokas, con tramos de peso que van desde los 95 kilogramos a menos de 60 kilogramos. La categoría femenina, por su parte, comprende 7 niveles con judokas que pesan más de 72 kilogramos hasta los pesos más ligeros, inferiores a los 48 kilogramos de peso.

Tanto en las pruebas olímpicas como en los campeonatos del mundo masculinos ha protagonizado casi siempre la superioridad japonesa, aunque también han existido numerosos campeones europeos, muchos de ellos de la antigua Unión Soviética.

Respecto a las mujeres, el éxito de las japonesas ha sido algo menor en los últimos años. Las españolas, británicas y sudamericanas han obtenido muchas de las victorias en los pesos ligeros.

El japonés Yasuhiro Yamashita, el mejor en la década de los ochenta, Riska y Geesink son considerados como los mejores de la historia. De hecho, este último se hizo con el título mundial con solo 19 años. Posteriormente, ganó dos campeonatos mundiales más y obtuvo la medalla de oro olímpica en Los Ángeles 84. En su espectacular palmarés se contabilizan más de doscientos combates ganados desde 1977 a 1985.

En la categoría femenina, destaca la figura de Ryoko Tani con 7 campeonatos del mundo y 2 medallas de oro olímpicas. Entre sus hitos más importantes destacan sus 84 victorias consecutivas hasta 1996. Además, fue una de las primeras mujeres judokas en competir en 5 juegos olímpicos, obteniendo medallas de distintos metales en todos ellos.



Los grados del judo

Las diferentes categorías de judo están divididas en grados Dan (maestro) y Kyu (alumno). El grado más elevado que se pude conseguir es el 12º Dan, categoría solo lograda por el propio Jogoro Kano, considerado el único Shihan (doctor).

Las categorías Kyu van desde la 6 ª kyu (cinturón blanco) hasta la 1 ª Kyu (cinturón marrón).

La categoría Dan comprende el color negro del 1º al 5º Dan, rojo y blanco del 6º al 8º Dan, rojo del 9º al 11º Dan y blanco para el 12º Dan.


Vestimenta

La indumentaria utilizada en el judo se denomina judogi y, junto al cinturón, forma el equipo requerido para su práctica. Se trata de una prenda que deriva del modo de vestir del Japón anterior al siglo XX.

El color del judogi suele ser blanco o azul. Este último se puede utilizar solo en competiciones donde se permita. Por lo general, están fabricados con algodón, aunque también pueden usarse otras fibras resistentes.


Técnicas del judo

Existen varias técnicas de judo que se dividen en función de los movimientos y las proyecciones ejecutadas:

– Nage-wasa: consiste den desajustar el centro de gravedad del adversario para que pierda el equilibrio y poder derribarlo.

– Osae-komi-wasa: se basa en técnicas de inmovilización para evitar que el oponente se ponga de pie.

– Shime-waza: son técnicas basadas en las estrangulación del cuello del adversario.

– Kansetsu-waza: son técnicas de luxación que se realizan sobre la articulación del codo del oponente con la ayuda de cualquier parte del cuerpo.

– Atemi-waza: técnicas de golpe derivadas del karate y el jiu-jitsu.

Por último, están las técnicas de reanimación, que son llamadas kuatsu-waza.

El judo es una práctica que involucra a todos los grupos musculares del cuerpo. Combina perfectamente la fuerza, la técnica y la táctica de combate, por lo que se genera un desarrollo íntegro de la persona. De hecho, hay que disponer de una óptima preparación física tanto de tipo aeróbico como anaeróbico. Las acciones rápidas y explosivas, así como la gran resistencia necesaria para soportar la duración de los combates, son cualidades distintivas de esta apasionante disciplina deportiva.